martes, 30 de octubre de 2012

Para las ánimas del purgatorio


Por la Biblioteca del Museo Etnográfico de Castilla y León

El próximo jueves celebraremos el «Día de Todos los Santos», este es un día en el que casi de modo inconsciente nos acordamos de todas aquellas personas a las que hemos querido (y seguimos queriendo) pero que ya no están con nosotros. Estoy seguro que todos nosotros tenemos algún recuerdo de infancia relacionado con esta fecha. A mí siempre me viene a la cabeza la imagen de las señoras limpiando las lápidas de sus muertos en el cementerio de mi pueblo y lloviendo, siempre lloviendo. Ese es mi recuerdo.

En la cultura popular la muerte siempre ha estado presente en forma de ritos, celebraciones  y supersticiones de  todo tipo. Esa cercanía con el hecho de la muerte es algo que hoy ya, por suerte o por desgracia, se ha ido difuminando y perdiendo con el paso del tiempo.
Un ejemplo de esta convivencia con la muerte se da en el precioso pueblo salmantino de La Alberca, aún hoy, todas las tardes, a última hora del día, la «Moza de las Ánimas» recorre las calles de la localidad haciendo sonar una esquila mientras recita una oración por las ánimas del purgatorio. Aquí podéis escuchar esta oración y el tañido de la esquila en una grabación realizada por Ángel Carril en los años ’80.

Asimismo, durante siglos, el 2 de noviembre, «Día de los Difuntos» era habitual comer sobre la tumba de un ser querido y, aunque se prohibió en el IIº Concilio de Braga del año 572, se continuó haciendo en Castilla y León hasta que el obispo astorgano Pedro de Acuña lo prohibió expresamente bajo pena de excomunión en 1553:

«Por quanto es venido a nuestra noticia que en muchas villas y lugares de este nuestro obispado ay una perniciosa cosa, costumbre y abuso: que el Día de los Finados, que se celebra al día siguiente de Todos los Santos, cada año van a comer sobre la sepultura de sus finados, lo qual paresce mas rito gentilito que hecho ni obra de buenos cristianos»

Este año no podré acudir a mi pueblo para comprobar si las señorucas siguen limpiando el barro de las lápidas, pero lo que parece que no faltará a su cita es la lluvia. Entre las nubes, aparecerá, también como siempre, el sol de los muertos… pero esa es otra historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario